En México nos apropiamos de nuestra cultura, la forjamos y hacemos creaciones
únicas que nos distinguen de los demás. Nuestro uso del lenguaje es una de las
tantas formas en las que marcamos tendencia.
Es por esto que Larousse creó una campaña donde los mexicanismos son los
protagonistas, jugando con la idea de que en México las palabras significan mucho
más de lo que los diccionarios podrían explicar en sus páginas. Se trata de
enorgullecernos haciendo difusión de términos que en sí no forman parte de un
diccionario formal pero que aún así juegan un papel importantísimo en nuestra
vida diaria.
Esta campaña nos invita a celebrar la identidad del mexicano, y la razón de su
éxito es que además está llena de ese humor pícaro de nuestra cultura. Que vivan
las palabras, estuvo a cargo de la agencia de publicidad Montalvo y se difundió
por todas las redes sociales, así como en el metro, espectaculares, bardas y
metrobus, dando un nuevo significado a nuestro día a día.
Además de sacarnos una sonrisa, el objetivo es también crear conciencia social;
pues la campaña incluye ciertos mexicanismos con significado que nos recuerdan
la importancia del respeto entre mexicanos. Por ejemplo: “Arrimón: acto de
acercarse al otro sin consentimiento. Por favor evite hacerlo”.
¿A qué nos invita esta campaña? A estar orgullosos de la riqueza de nuestro
lenguaje, que se va transformando y engrandeciendo gracias a nuestra
creatividad. Ushcale, güera(o) y bonche, son sólo algunos de los ejemplos de este
diccionario de palabras que refleja nuestra diversidad cultural.